*Extracto del análisis coyuntural
En este segundo semestre del año se pueden observar distintas mediciones que ofrecen consultoras, cámaras y universidades sobre las distintas variables que indican los niveles de actividad económica. Dentro de estas mediciones se encuentran los niveles de la industria y el comercio. Cuando pensamos sobre los componentes de estos rubros estamos pensando en las PYMEs, ya que conforman el 90% de las empresas que producen en la Argentina y son las que generan el 70% del trabajo privado formal, no se puede desconocer la gran conexión entre el bienestar de estas empresas y el nivel de empleo.
El Gobierno Nacional, al cambiar el modelo económico ha realizado modificaciones que han empezado a afectar los diversos rubros productivos del país y a sus ciudadanos. En principio, debe tenerse en cuenta el proceso inflacionario para poder comprender muchas de las medidas adoptadas y sus consecuencias, cabe recordar que este proceso viene ocurriendo en el país desde hace años, pero a partir de estas nuevas medidas se ha incrementado hasta llegar a poco más de un 25% en este primer semestre del año, siendo esta cifra lo esperado por el gobierno para todo el año. Se observa que el indicador de precios al consumidor registra una suba del 3.1% para Junio del 2016 respecto al mes anterior a nivel nacional. La clave para entender el incremento de este proceso son las variaciones en política monetaria y fiscal.
El aumento de las tarifas de los servicios sociales es otro de los componente causales que deben tenerse en cuenta al momento de pensar los motivos que afectan la actividad de las PYMEs, con subas que impactan tanto en los costos de las empresas, como a su vez, en los bolsillos de los consumidores que deciden bajar sus niveles de consumo. Ante la enorme escalada tarifaria, el gobierno decidió poner topes del 500% en los aumentos para actividades comerciales y de 400% para hogares, pero todavía debe esperarse la resolución de la Corte Suprema de Justicia, en cuanto a la legalidad de los aumentos.
En linea con estas decisiones políticas de no promover un Estado intervencionista y dejar libre la operación de los agentes de los mercados podemos considerar la decisión de no extender el programa de consumo Ahora 12, lo cual es otro revés para los niveles de consumo asistido.
La apertura de las importaciones no ha impactado en la actividad como muchos especialistas pronosticaron, en tanto que se registra una caída de las mismas a nivel nacional del -5.8% en comparación al semestre anterior. El final del sistema proteccionista no ha sido la causa de la caída, ya que se esperaba que la competencia desleal que debían enfrentar las PYMEs ante la apertura a los productos extranjeros de menores costos fuese uno de los principales responsables.
Mediante la aprobación de la Ley PYMEs (27.264) en el Congreso Nacional, se comenzó a desarrollar medidas concernientes a fomentar el desarrollo y el sostenimiento de las PYMEs. Esto ocurre luego de que el gobierno de Cambiemos haya derogado la ley Antidespidos, y se suma a una situación de congelamiento de la actividad económica provocada por el cambio de modelo.
Los puntos más importantes de la ley son:
- Se liberará a ese segmento de empresas del régimen del pago de “Ganancia Mínima Presunta”, para los ejercicios fiscales que se inicien a partir del 1° de enero de 2017.
- “El Impuesto sobre los Créditos y Débitos en Cuentas Bancarias y Otras Operatorias, que hubiese sido efectivamente ingresado, podrá ser computado en un 100% como pago a cuenta del Impuesto a las Ganancias por las empresas que sean consideradas micro y pequeñas y en un 50% por las industrias manufactureras consideradas medianas”.
- “Podrán ingresar el saldo resultante de la declaración jurada del impuesto al valor agregado, en la fecha de vencimiento correspondiente al segundo mes inmediato siguiente al de su vencimiento original, en las condiciones que establezca la AFIP”.
- El Poder Ejecutivo Nacional fue autorizado a emitir bonos de la deuda pública, cuya suscripción será voluntaria, para que con esos fondos la AFIP pueda devolver los saldos de impuesto a favor de las micro, pequeñas y medianas empresas.
- La AFIP habilitará un sistema de ventanilla única para la simplificación de los trámites tributarios, esto es impositivos, aduaneros y de la seguridad social.
- Para los casos de compañías vinculadas con una actividad regional y en áreas próximas a países limítrofes, podrán solicitar un tratamiento diferencial y temporal en las herramientas fiscales así como incentivos a las inversiones productivas y turísticas, entre 5 y 15% adicional.
Conclusión
Esta ley es sobre política tributaria e impositiva, desde la reducción en los gravámenes de débitos y créditos bancarios (impuesto al cheque), la posibilidad de extender en 90 días el pago del IVA , y el diferimiento en el pago de Ganancias cundo los contribuyentes realicen inversiones en bienes de Capital, medida que su objetivo principal es la búsqueda de impulsar la inversión. A su vez el gobierno también debió atenuar el impacto de las medidas económicas desde el lado del consumidor al incrementar las asignaciones y las jubilaciones mínimas, aparte de crear una categoría especial (Tarifa social) para los sectores más desprotegidos en cuanto a los nuevos niveles tarifarios.
Esta ley corre riesgo de no ser la herramienta esperada por varios motivos, en primer lugar debemos tener en cuenta que los niveles inflacionarios desalientan tanto a el consumo como a la inversión, ya que va socavando el capital que esta ley libera como gravamen a pretensión que se transforme en inversión. Asimismo teniendo en cuenta las variables que indican la caída del consumo, debe tenerse en cuenta que las empresas deciden sus inversiones en base a sus niveles de producción y ventas. Los indicadores que maneja la Confederación General Empresaria de la Argentina informan de una caída acumulada del 24,5 % del sector en el primer cuatrimestre del año, confirmando el estancamiento económico.
El gobierno entiende que con esta ley enfocada en el sector productivo no alcanza y decide asistir parcialmente el consumo con los incrementos otorgados en asistencia social y en el sistema de previsión, pero los niveles concebidos distan mucho de ser los necesarios para lograr una rápida activación del consumo, debemos tener en cuenta que el modelo actual se basa en que el Mercado, a través de sus mecanismos de oferta y demanda genera formas más eficientes de asignación de recursos y a su vez, requiere que el Estado no deba intervenir en el consumo.